No es
difícil llegar a leer noticias en nuestro país o el mundo en el último mes acerca
de frecuentes contaminaciones e intoxicaciones alimentarias a pesar de las
medidas de cuidados que se puedan tomar.
Hace
dos semanas aproximadamente se alertó la presencia de contaminación por virus
de hepatitis A en mariscos y moluscos extraídos en la zona de El Frontón del
Callao a partir de un monitoreo de SANIPES, institución adscrita al Ministerio
de Producción, llevando a un período de cierre de producción de venta de tales
alimentos y extracción en áreas específicas.
Del
mismo modo, en el mes de junio nos llegaba la alerta internacional del Centro para
el Control de Enfermedades de Estados Unidos (CDC, de sus siglas en inglés) de
no lavar el pollo durante su cocinado por el riesgo de contaminación asociada
de otros utensilios domésticos durante la preparación, por el Campylobacter.
Fuente común de 4 de cada 5 casos de infección con episodios de gastroenteritis,
o incluso episodios posteriores en el tiempo de Síndrome de Guillain-Barré en
países del primer mundo, sobre todo. Si bien se destacaba que, en el caso de
nuestro país, las fuentes de producción y venta suelen ser diferentes a estos
otros países, y por tanto las medidas de higiene distintas a tener en cuenta.
Más llamativa ha sido la noticia en Europa, sobre
una epidemia de listeriosis a partir de la contaminación de unas fuentes de producción
en la región de Andalucía (España), que llegó a generar casos de infección
incluso en otros países de Europa y a generar casos de fallecimiento. El Centro
Europeo para la Prevención y el Control de Enfermedades (ECDC, de sus siglas en
inglés) destacó un crecimiento del número de brotes de contaminaciones por Listeria
monocytogenes en el último lustro, donde los expertos estudian como causas los cambios de costumbres en la dieta de un país, mayor susceptibilidad
de una población por diferentes características y sobre todo el riesgo en
deficiencias puntuales en el control biológico de alimentos.
Con
respecto a este último punto, destacamos la importancia que tiene el estar
actualizados en cuanto a protocolo de trabajos de control de alimentos y el uso
de tecnologías modernas para tal. Como bien saben en nuestra empresa ofrecemos
una amplia gama de productos y herramientas para el control de riesgos
microbiológicos en el ambiente alimentario.
A propósito de ello nos gustaría alcanzarles
el enlace sobre un reciente artículo de la revista científica Sensor que
realiza una revisión de los avances más recientes en el desarrollo de aparatos
emergentes para el análisis de seguridad de alimentos:
Tecnología rápida que puede ayudar a la gestión de control alimentario en nuestro medio puede ser reconocida en el siguiente enlace que les alcanzamos:
https://www.bio-rad.com/en-
Como siempre en J&B Lab SAC nos esforzamos por darles a ustedes la más moderna y cualificada oferta de equipación de laboratorios y productos para el trabajo diario siendo representante de empresas internacionales reconocidas. En este enlace pueden observar desde nuestra página web, los productos que ofrecemos:
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